Cualquiera que desee comprar un nuevo ordenador de sobremesa suele enfrentarse a una amplísima selección de modelos con una gran variedad de características. Antes de comprar, el cliente debe averiguar qué ordenador le conviene más. Por ejemplo, un ordenador para juegos puede tener muy buen aspecto pero demasiada potencia para programas puramente ofimáticos. El siguiente artículo ofrece una pequeña ayuda.
Índice de contenidos
¿Qué es un PC de sobremesa?
Por regla general, se distingue entre portátiles y PC de sobremesa. Un portátil o notebook es un ordenador plano con pantalla integrada que está pensado principalmente para un uso móvil. Un PC de sobremesa es la típica torre que se coloca debajo del escritorio y gruñe tranquilamente mientras se accede al disco duro. Los PC de sobremesa son adecuados tanto para juegos como para aplicaciones de oficina y multimedia. El factor decisivo aquí es el contenido del ordenador: el disco duro, la CPU, la tarjeta gráfica y la RAM.
Ventajas sobre los portátiles
En cuanto al precio, los portátiles y los PC de sobremesa no tienen mucho en común, salvo en el caso de los dispositivos de gama alta. Por lo tanto, cabe preguntarse si un portátil con un uso mucho más flexible no lo haría igual de bien. Nuestra respuesta es no. Incluso al mismo precio, el ordenador de sobremesa sigue ofreciendo algunas ventajas, por ejemplo
- Capacidad de ampliación
- número de conexiones
- ratón y teclado externos, que suelen ser más fáciles de usar
- pantalla externa en una posición más cómoda para trabajar durante más tiempo
¿Qué ordenadores de sobremesa hay disponibles?
Los ordenadores de sobremesa suelen dividirse en tres categorías diferentes: Ordenadores de oficina, ordenadores multimedia y ordenadores para juegos (gama alta). Se diferencian por su contenido, es decir, por el procesador instalado, la tarjeta gráfica, la memoria RAM y la memoria instalada.
Las novedades en PC de sobremesa para oficina
Aunque los ordenadores de oficina no tienen por qué ofrecer el máximo rendimiento, los nuevos sistemas operativos exigen especificaciones cada vez más altas y mejores, por lo que también se registran fuertes avances en este ámbito. Para que las aplicaciones de oficina funcionen sin problemas, el PC debe tener al menos un procesador de cuatro núcleos a unos 3 GHz, así como una rápida unidad SSD de 128 GB o 256 GB. El sistema operativo puede instalarse en el SSD; para almacenar y gestionar los datos de los clientes, también puede utilizarse un HDD normal, que se conecta a la placa base con un conector SATA. Dado que las aplicaciones ofimáticas no tienen requisitos gráficos especiales, la tarjeta gráfica integrada en la placa base suele ser suficiente. Como memoria principal, 8 GB DDR3 deberían ser suficientes para ejecutar sin problemas las aplicaciones de Windows y Office.
Se ha producido un desarrollo en el área de las fuentes de alimentación ultrasilenciosas. El nivel de ruido es muy bajo incluso a plena potencia y no distrae del trabajo real. Un ratón normal, un monitor y un teclado siguen siendo necesarios como accesorios.
Los PC multimedia de sobremesa
Las especificaciones de un PC multimedia de sobremesa pueden ser algo superiores. Por lo general, el procesador sigue teniendo entre cuatro y ocho núcleos Intel o AMD, cada uno con un rendimiento de unos 3 GHz. Para un acceso rápido a los datos, una unidad SSD más grande, de al menos 512 GB, es adecuada en este caso para poder acceder rápidamente a los contenidos multimedia. Además, se necesita una tarjeta gráfica potente para editar vídeos y procesar imágenes. Con una GeForce GTX 9xx, el usuario debería estar plenamente satisfecho con al menos 2 GB de memoria gráfica. La memoria principal también debería ser adecuada con DDR3 y una capacidad de al menos 16 GB. Para que el manejo del ordenador sea lo más agradable posible, son adecuados una pantalla grande y un ratón y un teclado inalámbricos.
El PC de sobremesa para juegos
La clase más alta de PC de sobremesa es el ordenador para juegos. Tiene las mejores y más modernas especificaciones y, por supuesto, no sólo es adecuado para jugar, sino también para aplicaciones multimedia y de oficina. Las especificaciones pueden ser algo superiores a las del ordenador multimedia; por regla general, aquí se necesita una tarjeta gráfica mejor y algo más de RAM, y el rendimiento del procesador puede seguir siendo de cuatro u ocho núcleos. Si buscas una buena experiencia de juego, seguro que no te decepcionará una tarjeta de sonido externa que produzca audio estéreo 7.1. La memoria SSD puede ser de 128 GB o 256 GB, los datos del juego suelen almacenarse en el disco duro SATA con una memoria de al menos 1 TB. El ratón también debe seleccionarse específicamente para PC de juegos, ya que los requisitos aquí son diferentes a los de un PC de oficina.
¿Qué PC de sobremesa comprar?
Elegir el PC «adecuado» es difícil. Además de la posibilidad de montarlo uno mismo, muchos fabricantes ofrecen sistemas ya preparados. Sitios web como Desktop PC Test, que prueban y comparan los modelos de sobremesa actuales, pueden ayudarte a tener una visión de conjunto.